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Ya lo tenemos casi a las puertas, se acerca Halloween 2023 y celebrarlo sin ambientar un poco la casa no es lo mismo (especialmente si tienes niños).
Para montar una buena fiesta del terror solo necesitas mucha creatividad, tijeras, pegamento y algunos materiales muy fáciles de encontrar.
Te proponemos unas cuantas ideas para marcarte un súper plan dos en uno: por un lado pasarás una tarde genial en familia sacando tu lado más creativo y por otro conseguirás unos adornos de Halloween chulísimos.
¡Guarda estas ideas escalofriantemente divertidas!
Necesitarás: tarros de cristal de distintos tamaños, cinta de carrocero (o si lo prefieres y lo tienes a mano, vendas), pegatinas en forma de ojos y unas velas.
Tan fáciles de hacer que casi no necesita explicación: simplemente pega los ojos en el tarro bien limpio y seco y rodéalo con cinta. Luego solo tendrás que colocar una vela o una luz LED y voilá!
Necesitarás: cartulina negra, tijeras, pegamento y nylon transparente.
Simplemente recorta dos piezas de cartulina, una para hacer un cucurucho y otra en forma de anillo que será la base del sombrero (recuerda dejar unas pestañas para poder pegarlo). Haz tantos sombreros como quieras y simplemente cuélgalos del techo con el nylon transparente.
Necesitarás: bolas de porexpan (en cualquier bazar), pintura negra, cartulina negra, servilletas, pegamento, tijeras y pegatinas de ojos.
Para hacer los murciélagos tendrás que pintar las bolas de porexpan con pintura negra, pegar las alas, previamente recortadas en cartulina, y los ojos. En el caso de los fantasmas, solo tienes que unir la bola con la servilleta con un poco de pegamento en la parte superior, pegar los ojos y colgarlos todos en una cuerda.
Necesitarás: cartulinas de colores, tijeras, pegamento y mucha imaginación.
Tu creatividad es el límite: monstruos de garras afiladas, momias, brujas, calabazas terroríficas, pegajosas telas de araña... ¡puedes recrear cualquier cosa que te imagines! Lo básico es usar la cartulina, pero lana, tela, incluso arañas de mentira o cualquier cosa que tengas a mano te valdrá para conseguir una puerta verdaderamente terrorífica.
Necesitarás: globos, algo de pintura roja y blanca y cartulina para las patitas.
Puedes optar por hacer una sola araña o como en este caso, una espeluznante familia arácnida. Con un poco de pintura puedes darle una expresión divertida o horripilante a sus caras, ¡lo dejamos en tus manos!